El obispo, en sus palabras marcadas por la reflexión sobre la fraternidad y la unidad en la fe, durante su homilía, monseñor Concha Cayuqueo profundizó en la importancia de vivir el Evangelio en fraternidad, destacando la necesidad de cultivar relaciones más humanas y cooperativas, especialmente en un mundo donde la diversidad cultural es un don invaluable.

En sus palabras, el pastor diocesano hizo un llamado a reconocer constitucionalmente a los pueblos originarios, subrayando que el respeto y la valoración del pueblo mapuche que son desafíos pastorales prioritarios en las orientaciones para el periodo 2024-2028. Ahondó, por la preservación y transmisión de la rica cultura originaria de generaciones.

Se destacó que, a través del diálogo y la aceptación intercultural, se puede alcanzar el encuentro y la armonía que todos anhelamos y el llamado a trabajar juntos por una verdadera fraternidad.
Como un gesto de profunda espiritualidad, posteriormente, hermanos del pueblo mapuche donde nuestra lagmien Silvia Llanquileo Machi de la comunidad de Nienoco junto a don Rigoberto Queipul de la comunidad Conoco, acompañados por el obispo, presbítero y diácono, elevaron una oración (llellipun) en representación del pueblo mapuche católico, una oración elevada a Dios, simbolizando la unión de la fe cristiana con la tradición ancestral y sellando así una celebración que unió corazones y culturas bajo la mirada amorosa de Dios.

Al finalizar la Eucaristía, el obispo expresó sus agradecimientos a los hermanos del pueblo mapuche presente, a la lagmien Silvia, al hermano Rigoberto, a la vicaria de pastoral mapuche de la diócesis.

Fuente: Comunicaciones Temuco
Temuco, 27-08-2024